Joaquín Guzmán López, conocido como “El Güero” e hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, aceptó este lunes su responsabilidad penal ante una corte federal en Illinois, donde se declaró culpable de conspiración para traficar drogas y participar en actividades de crimen organizado.
Durante la audiencia, también reconoció haber intervenido en la captura y traslado forzado de Ismael “El Mayo” Zambada, antiguo líder del Cártel de Sinaloa.
La jueza Sharon Johnson Coleman validó la declaración del acusado tras confirmar que comprendía plenamente los cargos y las implicaciones legales, incluso sin el apoyo de un intérprete. Guzmán López admitió que colaboró durante años con la facción de Los Chapitos, coordinando rutas de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana hacia Estados Unidos.
Admite secuestro transfronterizo de “El Mayo”
De acuerdo con documentos judiciales y la lectura del acuerdo de culpabilidad, “El Güero” confesó haber participado en un operativo clandestino en julio de 2024 para engañar, sedar y trasladar a Zambada García desde Sinaloa hacia Nuevo México a bordo de una aeronave privada.
Una vez que ambos aterrizaron en territorio estadounidense, agentes federales procedieron a su detención.
Zambada, quien posteriormente confirmó los hechos en una carta difundida por su defensa, aseguró que fue citado con pretextos a un rancho en Sinaloa, donde posteriormente fue sometido y trasladado por la fuerza.
Larga trayectoria criminal y cooperación con autoridades
El acuerdo firmado entre Guzmán López, su abogado Jeffrey Lichtman y la fiscalía detalla que, después de la captura y extradición de su padre, Los Chapitos asumieron parte del liderazgo operativo del Cártel de Sinaloa junto con “El Mayo”.
La acusación sostiene que “El Güero” acumuló ganancias millonarias, participó en operaciones logísticas internacionales y financió actividades vinculadas con el cártel.
El documento también incluye una cláusula de cooperación, lo que podría reducir una sentencia que, de otro modo, sería equivalente a cadena perpetua.
Vínculos con la fuga del Chapo y violencia en Sinaloa
Registros oficiales señalan que Guzmán López estuvo involucrado en la operación que permitió la fuga de su padre del Penal del Altiplano en 2015, reforzando así su posición dentro de la estructura criminal.
Tras las capturas de líderes de ambos bandos —Los Chapitos y Los Mayitos—, autoridades mexicanas reportaron un incremento de violencia en Sinaloa durante septiembre de 2024, impulsado por disputas internas por control territorial.
Aunque Zacatecas, Durango y Sonora también resintieron efectos colaterales, Sinaloa se mantuvo como epicentro de los enfrentamientos.
Próxima audiencia y panorama judicial
La jueza estableció que Guzmán López deberá regresar a la corte el 1 de junio de 2026, fecha en la que se realizará una audiencia de seguimiento previa a su sentencia definitiva.
Mientras tanto, sus hermanos Ovidio, Jesús Alfredo e Iván Archivaldo continúan enfrentando cargos federales en Estados Unidos y México por su presunta participación en operaciones transnacionales de narcotráfico.
