El Ministerio de Defensa de Venezuela anunció este martes el inicio de una nueva fase del Plan Independencia 200, una operación militar de gran alcance que moviliza a 200 mil efectivos y todo el poder armado del país. El despliegue, que se extenderá hasta el miércoles, responde a lo que Caracas considera una “amenaza imperialista” por la presencia de buques, aviones y tropas de Estados Unidos en el mar Caribe, incluido el portaaviones USS Gerald R. Ford, recientemente incorporado al Comando Sur.
De acuerdo con el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, el operativo incluye “medios terrestres, aéreos, navales, fluviales y misilísticos”, además de sistemas de defensa aérea, unidades de la Milicia Bolivariana, cuerpos de seguridad ciudadana y comandos para la defensa integral.
“Se han desplegado casi 200 mil efectivos en todo el territorio nacional. Esto no afecta nuestras operaciones cotidianas contra las demás amenazas. El pueblo de Venezuela debe saber que tiene una nación resguardada y defendida por su Fuerza Armada”, afirmó Padrino en declaraciones a Venezolana de Televisión.
Estrategia de defensa y despliegue nacional
El Plan Independencia 200 busca reforzar el “apresto operacional” de las fuerzas armadas mediante maniobras coordinadas por aire, mar y tierra, con el propósito de mejorar el comando, control y comunicaciones del sistema militar venezolano.
Imágenes difundidas por el Ministerio de Defensa muestran la participación de cazas Su-30, sistemas antiaéreos Buk e Igla-S, así como vehículos blindados y tropas con fusiles AK-103. El general en jefe Domingo Hernández Lárez, comandante del Comando Estratégico Operacional de la FANB, acompañó al ministro durante el arranque de los ejercicios.
El gobierno de Nicolás Maduro asegura que esta movilización busca garantizar la soberanía y la defensa integral del país ante las maniobras estadounidenses en el Caribe, que considera un intento de “provocar un cambio de régimen” y “apoderarse de los recursos naturales de Venezuela”.
Escalada de tensiones con Washington
El despliegue ocurre en un contexto de creciente tensión entre Caracas y Washington. La Marina de Estados Unidos confirmó que el grupo de ataque del portaaviones USS Gerald R. Ford, con más de 4 mil marineros y nueve escuadrones aéreos, se encuentra operando en el área de responsabilidad del Comando Sur, que abarca gran parte de América Latina y el Caribe.
El secretario de Defensa estadounidense, Pete Hegseth, explicó que la misión busca reforzar la lucha contra el narcotráfico y garantizar la “libertad de navegación” en la región. Sin embargo, el gobierno venezolano sostiene que se trata de una provocación con fines políticos.
Hasta el momento, en Caracas no se ha observado un incremento visible de la presencia militar o policial, aunque las autoridades insisten en mantener el país en “alerta máxima de defensa”.
