Cinco periodistas de la cadena catarí Al Jazeera perdieron la vida la noche del domingo en un bombardeo israelí contra una carpa de prensa ubicada junto al hospital Shifa, en la Ciudad de Gaza. Entre las víctimas se encuentra Anas al Sharif, uno de los corresponsales más conocidos del enclave palestino.
De acuerdo con la televisora, la carpa estaba claramente señalada como zona de prensa. El ataque también causó la muerte del reportero Mohammed Qreiqeh, los fotógrafos Ibrahim Zaher y Mohamed Aliwa, y el conductor Mohammed Nofal, identificado por las autoridades locales como asistente de fotografía.
Momentos antes de su muerte, Al Sharif publicó en su cuenta de X:
“Bombardeos sin parar… Desde hace dos horas, la agresión israelí se intensifica en la Ciudad de Gaza”.
En otra publicación previa, advirtió:
“Si esta locura no termina, Gaza quedará reducida a ruinas, las voces de sus gentes silenciadas, sus caras borradas. Y la historia los recordará como testigos silenciosos de un genocidio que decidieron no detener”.
En un mensaje póstumo programado, escribió:
“Este es mi último testamento. Si estas palabras te llegan, debes saber que Israel ha logrado matarme y silenciar mi voz… No se olviden de Gaza. Y no me olviden en sus sinceras oraciones”.
Acusaciones y controversia
El Ejército de Israel confirmó el ataque, señalando que se trató de un “bombardeo de precisión” contra “el terrorista Anas al Sharif, que se hacía pasar por periodista de Al Jazeera”, alegando que era jefe de una célula de Hamás y responsable de ataques con cohetes.
Como prueba, presentó dos documentos cuya autenticidad no ha podido ser verificada de forma independiente. Uno de ellos lo identifica como miembro del grupo desde 2013 y herido en incidentes armados en 2017 y 2019. El ejército no detalló el origen de los documentos ni aportó evidencias adicionales.
Reporteros Sin Fronteras (RSF) calificó de “horrorizante” la muerte de los comunicadores y reiteró que “la mera publicación de documentos no constituye prueba suficiente de afiliación ni licencia para matar”.
Balance y contexto
Con estos decesos, el Sindicato de Periodistas Palestinos eleva a 237 el número de profesionales de la comunicación muertos desde el inicio de la ofensiva israelí en Gaza en 2023, de los cuales 10 trabajaban para Al Jazeera. La cadena, uno de los pocos medios internacionales con presencia constante en la Franja, tiene prohibida su emisión en Israel.
La actual guerra en Gaza comenzó tras el ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, que dejó más de mil muertos, en su mayoría civiles. Desde entonces, la ofensiva israelí ha provocado decenas de miles de fallecimientos en el enclave, según el Ministerio de Salud gazatí, cifras consideradas creíbles por Naciones Unidas.