La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dejó claro que el gobierno mexicano no permitirá la participación de fuerzas armadas estadounidenses en operaciones dentro de territorio nacional, y reafirmó que la cooperación con Estados Unidos en materia de seguridad se hará siempre bajo pleno respeto a la soberanía.
El pronunciamiento de la Cancillería fue una respuesta a declaraciones del embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, y a una orden ejecutiva del presidente Donald Trump que autoriza el uso de las fuerzas armadas estadounidenses contra los cárteles.
Johnson planteó la necesidad de conformar “un frente conjunto” para desmantelar redes criminales; la SRE, en cambio, puntualizó que cualquier acción deberá respetar las leyes mexicanas y ser ejecutada por las autoridades nacionales, con apoyo y coordinación internacional pero sin presencia militar extranjera en el país.
En su comunicado la SRE subrayó los principios que regirán la cooperación binacional: confianza mutua, responsabilidad compartida, igualdad soberana, respeto a la integridad territorial y cooperación sin subordinación. También recordó que México cuenta con una Estrategia Nacional de Seguridad orientada a “construir la paz con justicia”, que privilegia la atención a las causas estructurales de la violencia y el combate a la impunidad.
La dependencia insistió en que el combate al tráfico ilícito de drogas y de armas es clave para reducir la violencia en la región y que la mejor vía para avanzar es el diálogo y la coordinación respetando marcos legales de ambas naciones. Asimismo, afirmó que desde hace meses se trabaja en un acuerdo de seguridad basado en colaboración y respeto a la soberanía, y reiteró su postura: México no aceptaría la participación de fuerzas militares estadounidenses en su territorio.