Ante la amenaza que representan los drones durante eventos masivos, los gobiernos de México, Estados Unidos y Canadá han iniciado una estrategia conjunta para garantizar la seguridad en la Copa Mundial de la FIFA 2026, el torneo más grande en la historia del futbol.
En la primera Reunión de Coordinación Trilateral de Alto Nivel, celebrada en Estados Unidos, autoridades de los tres países analizaron los riesgos que implican los sistemas de aeronaves no tripuladas (UAS, por sus siglas en inglés), incluidos drones de uso comercial o militar utilizados por organizaciones criminales, y acordaron trabajar coordinadamente para prevenir incidentes durante el evento deportivo.
Durante el encuentro de tres días, participaron funcionarios gubernamentales, expertos en seguridad y representantes del sector privado. Por parte de México asistieron el secretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, y la representante del Gobierno de México para la Copa Mundial, Gabriela Cuevas. También estuvieron presentes el director ejecutivo del Grupo de Trabajo de la Casa Blanca, Andrew Giuliani, el embajador de Canadá en México, Cameron MacKay, y altos funcionarios de los Departamentos de Estado y Seguridad Nacional de Estados Unidos.
“Nos comprometemos a fortalecer la coordinación público-privada y a cerrar brechas tecnológicas y políticas que puedan afectar nuestra capacidad de respuesta ante estos desafíos conjuntos”, indicaron los tres gobiernos en una declaración conjunta.
La reunión incluyó un Intercambio de Expertos sobre tecnologías antidrones, así como una mesa redonda con empresas líderes de los tres países, enfocada en la innovación en seguridad y en nuevas estrategias para detectar, mitigar y neutralizar posibles amenazas aéreas.
El uso ilícito de drones, una preocupación regional
En el contexto de esta colaboración, funcionarios estadounidenses señalaron que los drones representan una amenaza real. El embajador Ronald Johnson, de Estados Unidos, subrayó que el uso de tecnologías antidrones puede marcar la diferencia:
“El uso de drones y sistemas de detección nos permite tomar la delantera”.
La preocupación por estas amenazas no es nueva. De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), desde febrero de 2022 se han detectado más de 155 mil drones operados por organizaciones criminales en la frontera con México, utilizados para vigilancia, contrabando de drogas y ataques armados.
Incluso la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha advertido públicamente que la Copa Mundial podría convertirse en objetivo de ataques con drones si no se toman medidas preventivas.
Más que futbol: seguridad y cooperación regional
La Copa Mundial de 2026 será histórica no solo por celebrarse por primera vez entre tres países, sino también por su escala: participarán 48 selecciones nacionales, se jugarán partidos en 16 ciudades (11 en Estados Unidos, 3 en México y 2 en Canadá), y se estima una asistencia de más de 5.5 millones de personas. El impacto económico podría superar los 14 mil millones de dólares.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México señaló que la seguridad del evento no se limitará a los estadios, sino que incluirá transporte, turismo, infraestructura y espacios públicos, todo bajo una estrategia compartida e intercambio constante de información entre gobiernos.